Hoy en día todo el mundo habla de la importancia de la tecnología, de los logros o de la competencia, pero el factor que hace que las empresas suban o caigan son los clientes.
El mejor café no es el de la sirena verde y blanca y la mejor hamburguesa no es la de la M amarilla. Son los productos más populares en su segmento por la cantidad de clientes que los adquieren.
Sin clientes, es imposible avanzar. Para las empresas, son el aire que hace subir el pan todos los días. El problema son los pagos. Si bien hay muchos clientes que cumplen con sus pagos, el período de pago puede ser de 30, 45, 60 o incluso más días, lo que afecta el flujo de caja. Si utiliza cosas como el factoraje de facturas o las líneas de crédito, en las que su margen de beneficio se ve afectado, puede caer en una pérdida operativa. En el sector de servicios, esto es difícil porque los servicios deben prestarse inmediatamente, lo que significa que deben pagarse por adelantado.
Otro desafío al que se enfrentan muchas pequeñas empresas es el rápido crecimiento, impulsado por la inercia de sus grandes clientes. Sin embargo, si estas grandes empresas encuentran problemas o cambios en sus planes que ya no incluyen el servicio o producto que usted brinda, o si les da “gripe”, es muy probable que su empresa pueda tener “neumonía”. Por eso es necesario tener una estrategia de ventas en la que ningún cliente suponga más del 50% de tus ingresos. Esto puede ser difícil porque puede salirse de su zona de confort; es mucho más fácil crecer con los clientes que tienes que salir a buscar más.
Es fundamental buscar nuevas oportunidades y entender cuáles son las nuevas tendencias del mercado y quién es tu competencia. La innovación y mirar fuera de la caja mantiene fresca a una empresa, lo que le permite ofrecer diferentes productos o servicios que tienen una gran demanda.
Muchas empresas empezaron fabricando un buen producto o prestando un servicio. Luego intentan diversificar sus servicios o bienes. El resultado es que pierden de vista su negocio principal y corren el riesgo de descuidar la esencia de su empresa. También es importante comprender las necesidades de sus clientes y evolucionar con ellos y el mercado. .
Un error común es que el precio es el factor más importante para los clientes. De hecho, el enfoque debe estar en el servicio. Si los clientes se van por un mal servicio, será difícil recuperarlos, pero si se van por el precio, pueden volver sin importar el precio si el servicio de la competencia no está a la altura de las expectativas. Para mí y para mi empresa, el factor más importante es asegurarnos de que nuestro servicio nos distinga de nuestra competencia. Como tal, el precio queda relegado a un segundo plano.
Nunca puede haber suficientes clientes para su negocio. Si tiene un exceso de capacidad, es hora de invertir en maquinaria y aumentar su personal, al mismo tiempo que considera su margen operativo. Es importante recordar que la cantidad de clientes en su cartera puede ser vital para la fijación de precios en caso de una adquisición.
En última instancia, la clave del éxito es atraer a tantos clientes como sea posible y continuar brindándoles un servicio de calidad para garantizar que se queden contigo a largo plazo.
Hoy en el mercado específico de nuestra empresa, hay muchos competidores que ofrecen muchos servicios, pero nuestro enfoque está en crear valor en el servicio que brindamos, para que nuestros clientes permanezcan con nosotros.
En conclusión, concéntrese en sus clientes porque tener una gran cantidad de clientes lo hace más atractivo en el mercado, y si un cliente encuentra un problema, es probable que su propio negocio no se vea afectado.
Fuente: MEXICO BUSSINES NEWS, 2023. https://mexicobusiness.news/mobility/news/lifeblood- every-company-clients
